El hígado graso, conocido como esteatosis hepática en la terminología médica, es una condición cada vez más común en la sociedad actual debido a nuestra dieta alta en grasas y estilo de vida sedentario.
Se produce cuando los ácidos grasos y triglicéridos se acumulan en las células del hígado, formando hasta 5 a 10% del peso total del órgano.
Su aparición está directamente relacionada con el síndrome metabólico, pero también puede ocurrir debido a los daños causados por el consumo excesivo de alcohol.
Mientras que el hígado graso es una condición reversible, si se sale de control que puede conducir a complicaciones graves y afectar a otros sistemas en su cuerpo.
El problema es que no tiene síntomas evidentes al principio y generalmente progresa en silencio.
Afortunadamente, hay varios tratamientos alternativos disponibles que, consumidos regularmente, ayudan a combatir esta condición antes de que pueda afectar su calidad de vida.
A continuación, nos gustaría compartir 6 de los mejores tratamientos naturales para tener en cuenta si está preocupado por esta enfermedad.
¡Toma nota!
1. Té de jengibre

La raíz de jengibre contiene agentes antiinflamatorios activos y ingredientes desintoxicantes que pueden ser útiles en el tratamiento del hígado graso.
Gingerol, la sustancia que da a su jengibre su picante, actúa como un poderoso antioxidante y anti-lípidos que ayuda con cualquier acumulación de grasa en el hígado.
Gingerol lucha contra las partículas que causan estrés oxidativo, que está vinculado a una mayor probabilidad de contraer esta condición.
¿Que debería hacer?
Hacer un té de jengibre fresco y después de dejarlo reposar, disfrutar de hasta 3 veces al día.
Tomar por 2 semanas seguidas.
2. Té Boldo
Boldo es una planta apreciada durante siglos por ayudar no sólo a su digestión, sino también a su hígado, también.
Sus habilidades de limpieza fomentan la función apropiada del hígado y de la vesícula biliar mientras que los hace mejores en digerir la grasa.
Se recomienda para disolver piedras de la vesícula biliar y la limpieza de los canales que llevan la bilis al intestino.
¿Que debería hacer?
Consiga las hojas del boldo en su almacén preferido de la fuente herbaria y utilícelas para hacer un té.
Consumir dos veces al día durante una semana consecutiva.
3. Zumo de rábano

La gran cantidad de antioxidantes en rábanos ayuda a descomponer las grasas acumuladas en el hígado, mejorando su capacidad de desintoxicarse.
Comer rábanos fomenta niveles controlados de colesterol y triglicéridos, dos lípidos que hacen que el hígado graso sea más difícil de tratar.
¿Que debería hacer?
Ponga algunos rábanos en una licuadora y mezcle con una taza de agua hasta que todos los grumos se han ido.
Colar y consumir cada dos días.
4. té de acelga
El consumo de acelga en forma de té concentra sus antioxidantes y agentes desintoxicantes, que apoyan la función hepática, especialmente la digestión de los compuestos grasos.
Las sustancias activas en la acelga manejan la inflamación causada por el hígado graso mientras que estimulan la eliminación de toxinas.
¿Que debería hacer?
Ponga las hojas de la acelga en una olla con agua, hierva a fuego lento durante 5 minutos, y luego colar.
Consumir 2 o 3 vasos al día durante dos semanas.
5. Jugo de toronja

Jugo de toronja fresca es una gran solución para ayudar a las personas con hígado graso.
Uno de los compuestos en pomelos, la naringenina, funciona como un potente antioxidante. Tiene un efecto diurético que estimula la eliminación de líquidos retenidos y controla la inflamación.
Pomelos también son buenos en la lucha contra los síntomas del síndrome metabólico, una condición relacionada con el hígado graso que puede conducir a la obesidad si se deja sin control.
¿Que debería hacer?
Exprima seis pomelos y endulza el jugo con una cucharadita de miel.
Beber con el estómago vacío, sin ningún otro alimento, durante al menos 2 semanas seguidas.
6. El té de cardo de leche
El té de cardo de leche es uno de los remedios alternativos más populares por ahí para el hígado graso.
Tiene capacidades protectoras del hígado y antiinflamatorias que ayudan a proteger las células del hígado, reduciendo la acumulación de lípidos.
¿Qué debo hacer?
Haga un té con las semillas del cardo de leche o, alternativamente, consiga los suplementos del cardo de leche de su tienda herbal
Tome una vez al día, todos los días.
Todos estos tratamientos tendrán un efecto positivo en su esteatosis hepática. Sin embargo, cada uno de ellos debe ir acompañado de una dieta sana, baja en grasa para ver grandes resultados.
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